Si te han diagnosticado una hipertensión arterial, una de las primeras cosas que debes hacer es modificar la dieta y la preparación de las comidas. Para conseguirlo, conviene tener en cuenta algunas recetas sabrosas sin sal añadida
Si bien las recetas sin sal tienen mala reputación, las hierbas aromáticas pueden cambiar los datos y aportar a los platos sabores insospechados. Nuestra alimentación actual es rica en sodio, este mineral no se encuentra únicamente en la sal propiamente dicha, pero en forma de conserva como los snacks, los alimentos grasos, etcétera. Normalmente son sabrosos, pero potencialmente peligrosos. Por consiguiente, para prevenir y tratar la hipertensión es necesario redescubrir ciertos sabores y aprender a preparar comidas sin sal añadida.
Patatas jardinera
Este es un buen ejemplo, y se puede llevar un régimen alimenticio de este tipo para la hipertensión. Estas patatas integran hierbas y alimentos como ajo y pimiento, que ofrecen un sabor muy particular además de propiedades sanas.
Macarrones y salsa de laurel
Otra receta que todo el mundo debe preparar es la pasta. Esta comida con una salsa especial puede ser una delicia para toda la familia. Todo el mundo sabe lo difícil que es cocinar para todos cuando ciertos miembros tienen que seguir un régimen especial.
Coliflor a la vinagreta
En general, las verduras más experimentadas son las más sabrosas, pero para conseguirlo no es necesario añadir sal. Esta receta sabrosa es una prueba de ello. La coliflor se puede preparar así como las vinagretas de verduras, sin añadir sal.
Pastel de queso
Inútil recordar que si eres golosos de los pasteles, el de queso se puede adaptar a la receta tradicional y saborear un plato bajo en sodio, pero igualmente muy sabroso.
Todos estos alimentos sin sal son muy importantes, porque no sólo ayudan a reducir la presión, sino igualmente a reducir la probabilidad de enfermedades cardiovasculares.
Fuente: http://vivirsalud.imujer.com/