Para disminuir los síntomas del resfriado se puede hacer gárgaras con agua y sal, o bien con miel y limón, favoreciendo la disminución de la inflamación.
En castellano utilizamos la expresión ¡Vete a hacer gárgaras! en tono despectivo para decirle a otra persona que nos está molestando, pero parece ser que puede beneficiarnos que nos lo digan a menudo, sobre todo si lo llevas a la práctica.
En un artículo de The Japan Times con título ";To gargle or not to gargle?"hacer gárgaras o no hacerlas?), se cita la historia de una familia de Chicago que logro esquivar la pandemia de influenza (gripe) del año 1918, donde murieron millones de personas, por haber realizado gárgaras cada día con un colutorio comercial.
Los japoneses son unos fervientes creyentes
Para ellos la práctica higiénica diaria de hacer gárgaras disminuye la aparición de infecciones del tracto respiratorio superior (ITRS), hasta tal punto que en el año 2009 el ministro de salud, trabajo y bienestar promovió una campaña a favor de realizar gárgaras cada día para prevenir la incidencia de gripe por la cepa vírica H1N1.
Según un estudio publicado el año 2005 en la American Journal of Preventive Medicine se llega a la conclusión que hacer gárgaras con agua solamente cada día reduce en un 36% la aparición de ITRS.
¿Pueden las gárgaras disminuir los síntomas del resfriado?
Para disminuir los síntomas durante el resfriado se recomienda hacer gárgaras con agua y sal, o bien con miel y limón, favoreciendo la disminución de la inflamación y la expectoración de la mucosa.
Por tanto, esta acción tan poco cuotidiana en nuestra cultura tiene un efecto destacable en la salud de las persona, así que sería interesante incorporarla a nuestros hábitos saludables.
¿Cómo se hacen las gárgaras?
Hacer gárgaras consiste en el acto de introducirse una cantidad de líquido en la boca, reclinar ligeramente la cabeza hacia atrás para que el fluido se dirija a la parte posterior y espirar aire para hacer burbujear el líquido, normalmente agua o enjuague bucal homologado, con el fin de realizar una limpieza de la zona buco faríngea.
La zona de la boca y la faringe está en contacto con sustancias externas como microorganismos, tóxicos o contaminantes ambientales presentes en los alimentos, en el aire o en el entorno, incluso nosotros mismos nos podemos dañar la mucosa bucal y lengua de forma mecánica por mordeduras, o quemaduras al ingerir alimentos muy calientes.
Problemas habituales de la boca y garganta
Las principales afectaciones son la aparición de aftas, úlceras, inflamación como gingivitis, faringitis, laringitis, afonía, estomatitis ulcerosa crónica, debidas principalmente a infecciones víricas o bacterianas.
En estos casos la idea de las gárgaras está enfocada a la disminución de los síntomas y facilitar la curación de estas utilizando tisanas de diferentes plantas medicinales antiinflamatorias, demulcentes, antisépticas y estimulantes del sistema inmunitario y epitelizantes.
¿Qué plantas medicinales son las más convenientes?
Para realizar la tisana se escogerá una mezcla de cuatro o cinco plantas, como la manzanilla, menta, romero, salvia, regaliz, llantén, malvavisco, agrimonia, erísimo, anís o hinojo.
Se hace una infusión de una cucharada sopera de la mezcla de plantas en medio litro de agua, llevando el agua a ebullición, añadimos las plantas y dejamos reposar 10 minutos mínimo, colamos la infusión y dejamos enfriar para poder hacer las gárgaras.
Por ejemplo, para una faringitis se podría realizar una infusión con agrimonia, llantén menor, tomillo, malvavisco y salvia. Una vez hecha realizar gárgaras varias veces al día para hacerlo más efectivo.
Otras formas de hacer gárgaras
Otra forma de hacer colutorios es con los extractos líquidos en gotas, p. ej. se puede hacer un colutorio antiinflamatorio y antiséptico con llantén mayor y salvia diluidos en un vaso de agua tibia, recomendado par amigdalitis o faringitis, aunque también se puede hacer por infusión de las mismas plantas.
¿Agua caliente o fría?
En casos de úlceras y aftas mejor hacer gárgaras con agua fría, nunca caliente, ya que estas son de naturaleza caliente y se agravaran los síntomas. Si la afectación conlleva afonía es interesante añadir a la mezcla erísimo o planta de los cantores.
Para hacer gárgaras se utilizará principalmente agua, infusiones o bien colutorios o enjuagues homologados. No hacer gárgaras con fluidos muy calientes o muy fríos que puedan irritar la mucosa.
Un consejo
Vigilar con la utilización de agua oxigenada, yodos, alcoholes o enjuagues con extracto de sanguinaria para gargarismos, ya que a largo plazo y utilizados de forma poco precavida podrían producir quemaduras en la mucosa bucal y faríngea o alterar la propia flora bacteriana. Se debe tener cuidado con los jugos de cítricos porque pueden dañar el esmalte dental si se utilizan habitualmente.
Espero os haya resultado interesante y os animo a que introduzcáis este pequeño acto en vuestra vida cuotidiana para incrementar vuestro estado de salud.
En todos los casos le recomendamos consultar con su médico, terapeuta u otro profesional de la salud competente.
Fuente: www.enbuenasmanos.com