TRATAMIENTO PARA EL DOLOR DE ESPALDA....

Si sufrimos de dolor de espalda es conveniente conocer que es lo que lo causa y también el tratamiento para el dolor de espalda que podemos elegir.

Causas del dolor de espalda

Hay muchísimas causas del dolor de espalda: las posturas erróneas, el tipo de trabajo, sobrepeso, sedentarismo y falta de ejercicio físico, artrosis, artritis, fibromialgia, hernias discales, traumatismos, etc.

Fortalecer la musculatura, el mejor tratamiento para el dolor de espalda

En el esqueleto entran en juego huesos y músculos, ya que los músculos son como una capa de protección del esqueleto, articulaciones, ligamentos, huesos, entre otros. Y sobre estos, los músculos se adaptan a ellos y se potencian su actividad y ayuda al mantenimiento de estos.

Por lo tanto podemos tener una estructura ósea muy buena, y unas articulaciones sanas, pero lo esencial en nuestro organismo es mantener una musculatura adecuada para evitar esos dolores de espalda.

Tipos de dolores de espalda

• Agudos: cuando el dolor de espalda ocurre repentinamente (por ejemplo después de levantar un objeto pesado) Por lo general suelen mejorar por sí solos, pero podrían pasar semanas si no hay una buena recuperación. El más conocido es el lumbago.
• Crónicos: cuando el dolor de espalda persiste con el paso de los meses o años. Las causas pueden ser muy distintas: artrosis, artritis, hernias discales, etc.

¿Cómo pueden ser esos dolores?

• El dolor de espalda puede ser un dolor sordo o una sensación aguda como una perforación o ardor en una zona.
• Puede irradiarse hacia los brazos y las manos (normalmente de origen cervical) o incluso puede llegar a irradiar la zona de las piernas y el pie (posible origen lumbar)
• Se pueden incluir diferentes síntomas al dolor de espalda como por ejemplo, debilidad, entumecimiento o incluso a veces podemos llegar a sentir una especie de hormigueo.

Ejercicio físico, un buen tratamiento para el dolor de espalda

Se ha demostrado que las personas que tienen menos fuerza de extensión del tronco, de fuerza en los pectorales, poco equilibrio y resistencia aeróbica, suelen tener más dolores de espalda o perciben que su espalda no está funcionando correctamente.

Además, se ha observado que las personas que hacen ejercicio físico de modo frecuente, pero no intenso, tienen menos episodios de dolor de espalda que las personas sedentarias.

Por eso, es importante mantenerse activo. Los ejercicios específicos de espalda aunque no le ayudarán a obtener mejoras rápidas si que conseguirán que se sienta mejor y con menos dolor.

Pero una vez se haya recuperado, el ejercicio moderado le ayudara a prevenir posibles episodios posteriores de dolores de espalda.

Relajarnos y estirar la musculatura es básico ya que la mayoría de dolores de espalda son causados por la tensión.

¿Cómo se aconseja dormir para evitar los dolores de espalda?

Si se duerme boca arriba es recomendable dormir sin almohada o con una pequeña debajo del cuello o de la cabeza.

También es muy adecuado dormir con una almohada entre las rodillas.

Si se duermes boca abajo y sientes dolores de espalda, se puede colocar una pequeña almohada o cojín debajo de la barriga.

Esto de poner la almohada se hace para poder mantener la columna vertebral recta.

Es conveniente tener un colchón duro para tener un mejor soporte para la columna más que no uno blando.

Plantas medicinales para tratar el dolor de espalda

Cuando buscamos mejorar los síntomas y las causas del dolor de espalda podemos encontrar mucho alivio con las plantas medicinales.

Para aliviar el dolor de espalda está recomendado tomar extracto o infusiones de corteza de sauce, bardana, alfalfa, matricaria (no recomendada en embarazadas)

El Harpagofito es uno de los mejores remedios naturales para el dolor de espalda así como para las afecciones reumáticas, artritis y artrosis (al igual que la Ulmaria)

También es importante tomar cola de caballo para obtener silicio ya que es muy importante para los tejidos y los huesos de nuestro organismo.

Otras terapias para tratar el dolor de espalda

La acupuntura, la osteopatía, la quiropráctica y el yoga son algunas de las muchas terapias naturales que pueden ayudarnos.

En todos los casos le recomendamos consultar con su médico, terapeuta u otro profesional de la salud competente.

Fuente: http://www.enbuenasmanos.com/