Una investigación de la Universidad de Queen Mary en Londres y la Universidad de Oxford señala al Gobierno del Reino Unido la importancia de reforzar la harina con ácido fólico como ya se hace en otros países para evitar malformaciones en el feto.
La investigación encontró que al menos dos mil casos de bebés con malformaciones podrían haberse evitado desde 1998 si el Gobierno hubiera hecho caso a la recomendación de reforzar la harina. Los autores del trabajo apuntan que entre 1998 y 2012 prevaleció en el Reino Unido el número de embarazos con defecto en el tubo neural, mientras que en Estados Unidos, donde durante ese mismo periodo se añadió ácido fólico en la harina “se redujo la incidencia en un 23%”.
Para los expertos si en Inglaterra se hubiera tomado la misma medida los casos de malformaciones habrían caído e un 21%, equivalente a 2.014 casos.
En noviembre la Comisión Científica Asesora en Nutrición (SACN, por su sigla en inglés) volvió a instar a los ministros a aplicar las directrices emitidad en los años 2000, 2006 y 2009 para mejorar la ingestión de ácido fólico entre las embarazadas.
Según la SACN, el número de abortos por defectos del tubo neural, como espina bífida y anencefalia, ha aumentado en los últimos años en Inglaterra y Gales, con 430 en 2013, frente a 390 en 2012 y 299 en 2009.
El sistema sanitari público británico recomienda actualmente consumir 400 microgramos al día de ácido fólico durante la concepción y los primeros tres meses del embarazo, pero los investigadores consideran que no es suficiente dado que muchas mujeres no saben que están embarazadas a tiempo para beneficiarse.
Por eso los autores del trabajo que fue publicado en “Archives of Disease in Childhood” consideran que el solicitar a las mujeres que tomen pastillas para obtener este nutriente no está funcionando como prevención, por lo que sería más eficaz enriquecer la harina con él, un proceso al que denominan como “muy seguro” y sin contraindicaciones.
Fuente:www.lr21.com
.jpg)
.jpg)