domingo, 14 de febrero de 2016

¡ALERTA! PODRÍAS ESTAR SUFRIENDO ENDOMETRIOSIS!!.... y no saberlo!!!....




¡Jamás lo habría pensado!

Muchas mujeres podrían estar sufriendo de esta condición y ni siquiera saberlo. Por tanto, es muy recomendable que si experimentas alguno de estos síntomas realices una consulta con tu ginecólogo lo más rápido posible.



La endometriosis afecta la salud sexual de más mujeres de las que imaginas, y la mayoría de ellas tardan hasta 2 años en visitar un médico por primera vez antes de ser diagnosticadas. ¡No seas una de ellas!

Es normal que todas tengamos dolor en los días de nuestra menstruación. Sin embargo, hay un nivel tolerable, y cuando ese horizonte se pasa, es hora de preguntarse si ese dolor no querrá decirnos algo más.

Si dura un día o dos y puedes soportarlo con medicamentos, estás dentro de lo esperado, pero si tu sangrado es excesivo, apenas puedes moverte y las relaciones sexuales te duelen, hay algo que no está funcionando de manera adecuada y podrías estar sufriendo endometriosis.

Es una condición en la que el tejido de las paredes del útero (denominado endometrio) se extiende a otros lugares de tu cuerpo además de donde debería estar, que es en el útero. Se esparce a tus ovarios, trompas de Falopio y a veces hasta los intestinos.

Lo que sucede con este tejido es que se comporta igual que el endometrio que permanece dentro del útero. Por lo tanto, se hincha para preparase para recibir el óvulo y luego sangra. Pero cuando esto ocurre afuera de tu útero, las células se inflaman y eso provoca un dolor insoportable. Y al no tener dónde desechar esa sangre, esta permanece en tu cavidad pélvica y causa lesiones y quistes.

Esta condición puede ser una condición autoinmune, por la que tu sistema ataca por error al tejido bueno para eliminar esos restos y provoca inflamación.

Uno de los factores que influye en esto puede ser la dieta y el estilo de vida que lleva cada mujer, ya que es una condición que depende de las hormonas. Por ejemplo, el exceso de hierro podría ser una razón.

Los síntomas relacionados con esta enfermedad son los siguientes:

El dolor provocado por tu período dura más de 3 días.Cuando tienes tu menstruación no puedes hacer otras actividades de manera normal.Los medicamentos regulares ya no te hacen efecto.Tener relaciones sexuales o usar tampones te resulta muy doloroso.El dolor se expande hacia tus piernas y columna.La cantidad de tu sangrado es excesiva y debes cambiar tu protección cada menos de dos horas.Cuando orinas también sufres dolor y orinas con sangre a menudo.Padeces diarrea junto con tu período.Siempre estás cansada y te sientes débil.
Si puedes identificar varios de estos síntomas en tu malestar, tienes riesgo de estar sufriendo endometriosis, pero no deberías asustarte ni mucho menos avergonzarte. Lo que sí o sí debes hacer es consultar al ginecólogo para no padecer más estos desgastantes síntomas.

La endometriosis también puede impactar tu lado emocional. Muchas mujeres sufren depresión, y esta afecta su carrera, educación, y relaciones.

Además, quienes no padecen esto tienen dificultades para comprender cómo se sienten las mujeres con esta condición y cuan debilitante puede ser. Esta es otra razón no menor para pedir ayuda y que otros sepan lo que te sucede para acompañarte.

A pesar de que puede ser muy doloroso y angustiante, una buena noticia es que esta condición puede tratarse, y no es grave. Generalmente se realizan tratamientos con hormonas para bloquear o reducir la producción de estrógeno en el cuerpo.

También se recomienda evitar comidas con alto contenido de azúcar que puedan aumentar tu índice glucémico y también prestar atención a tu estilo de vida, reducir el estrés y descansar lo suficiente.

Otra muy buena noticia es que el 70% de mujeres diagnosticadas con endometriosis quedan embarazadas sin ningún problema, y el 30% restante necesita ayuda pero no tiene severas dificultades. Por lo tanto, la endometriosis no suele afectar nuestra fertilidad de un modo irreversible.

Ahora que ya tienes toda la información necesaria, no tienes excusas para no consultar a tu ginecólogo. ¡Lo agradecerás!


Fuente: http://www.imujer.com/

Comentarios Facebook