En términos médicos la dispepsia o mala digestión, se manifiesta con síntomas como inflamación, ardor, acidez, eructos, gases, sensación de plenitud, náusea y vómito; sin embargo es una considerado un trastorno benigno y curable.
La mala digestión o indigestión está asociada a malos hábitos alimenticios, trastornos físicos y/o emocionales, pero aún no hay evidencia de que exista una relación entre este padecimiento gastrointestinal y el cáncer de colon.
Factores de riesgo de cáncer
De acuerdo con el artículo Global Cancer Statistics publicado en CAA Cancer Journal of Clinicians en el año 2011, el cáncer de colon está asociado a otros factores de riesgo diferentes a la mala digestión, entre de los cuales se encuentran:
1. Tabaquismo
2. La inactividad física
3. Una dieta alta en grasas y/o baja en frutas, vegetales o fibra
4. Padecer de sobrepeso u obesidad
5. Consumir excesivamente bebidas alcohólicas
6. Factores genéticos
Es sumamente importante, tomar en cuenta los primeros cuatro factores, ya que estos pueden ser controlados y de esta forma se podrá actuar de manera preventiva.
En el caso de que existan antecedentes heredofamiliares de cáncer de colon en una persona que aún no lo padece, se debe considerar:
1. Comenzar a realizar actividad física de forma regular (al menos 30 minutos 3 veces a la semana)
2. Moderar el consumo de bebidas alcohólicas
3. Dejar de fumar
4. Si existe sobrepeso u obesidad, acudir a un especialista en nutrición para iniciar un tratamiento de reducción de peso.
Se recomienda que de presentar de manera continua mala digestión u otros trastornos gástricos, se consulte regularmente a un especialista para prevenir complicaciones, ya que más de 65% de quienes acuden a consulta por esta razón, presentan cuadros de daño alto o severo.
Fuente: http://bienestar.salud180.com
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